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En Aragón hacen falta 934 enfermeras, mientras Zapatero abre la puerta a la emigración de profesionales de enfermería

Sólo en Miguel Servet necesita 311 profesionales más para poder cumplir con los índices mínimos que marca la OMS. Esta falta de enfermeras repercute en la seguridad de los pacietnes. En toda España se necesitan 122.000 enfermeras.

spaña necesita 122.400 enfermeras para equipararse a los sistema sanitarios europeos y cumplir, además, los índices mínimos que marca la OMS, tal y como reconoció el Pleno del Senado en su Ponencia de Recursos Humanos.

SATSE Aragón considera que en esta Comunidad Autónoma se necesitan 934 enfermeras, y casi un tercio de este número se situaría en el Miguel Servert, donde esa carencia es de 311 profesionales, a día de hoy, una enfermera, en turno de noche, puede llegar a atender a 22 pacientes, cuando la cifra óptima es de 15.

Por provincias, como es lógico Zaragoza es la que más necesidad tiene de enfermeras, 681, además, se presentan otros problemas como la reestructuración de matronas en el sector II, el que incluye zonas como el Actur, la Jota o Zuera.  SATSE Aragón cree que en Huesca serían necesarias 150 enfermeras para cumplir los ratios mínimos, y en Teruel, la cifra es de 103, 34 de ellas en Alcañiz, aunque en esta provincia hay una gran diferencia entre las zonas urbanas y rurales, debido a la dispersión de la población.  

A todo esto, se une otro problema que un gran porcentaje de la plantilla de enfermeras en Aragón se encuentra en situación de inestabilidad y se produce un número elevado de contratos eventuales para poder hacer frente al aumento de la población.

Por otra parte, a nivel nacional,  SATSE  ha interpuesto un escrito de queja a la Defensora del Pueblo en el que pedía que instase al Ministerio de Sanidad a realizar “con carácter de urgencia” el estudio oficial sobre las necesidades de profesionales de enfermería en el Sistema Nacional de Salud y a contratar a las enfermeras que sean necesarios para paliar este déficit. Escrito que también ha sido remitido a la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo para que aperciba al Estado Español y le inste a poner en marcha soluciones y realizar el estudio mencionado.

SATSE explica en su queja a la citada Comisión de Peticiones que el Estado Español “aún reconociendo la gravedad de la situación ha hecho caso omiso a ésta, con lo que está vulnerando preceptos comunitarios en materia de salud, seguridad y condiciones de trabajo de los trabajadores y los preceptos destinados a proteger la propia salud de los ciudadanos de un estado miembro de la Unión”.

Mientras tanto el Gobierno Zapatero ha abierto la puerta a la emigración de enfermeras suscribiendo un acuerdo con el gobierno alemán. Éste, conocedor de la alta formación de los profesionales de enfermería españoles, ha lanzado una oferta masiva para su contratación, lo que podría traducirse en un la precarización de la asistencia sanitaria en el seno de nuestro Sistema Nacional de salud.

“La negligencia del Gobierno, explican desde SATSE, puede provocar la salida masiva de profesionales de enfermería, con una formación excelente, a pesar de que tanto el Pleno del Senado como la Comisión de Sanidad del Congreso han reconocido que faltan miles de profesionales en el SNS, 122.400 concretamente”.

Este hecho puede provocar, en opinión de SATSE, la precarización de la asistencia sanitaria, perjudicando la seguridad de los ciudadanos y también la de las propias enfermeras que verán incrementado su nivel de estrés y las bajas por enfermedad, lo que generará, aún más, un descenso en la calidad de las asistencia que los usuarios reciben ya que cada vez serán menos las enfermeras que podrán cuidarles.

Dinero en formación malgastado

 

“Otro hecho constatable, explican desde SATSE, es que España ha gastado miles de millones de euros para la formación de profesionales de enfermería, necesarios en nuestro país, que van a trabajar ahora para el sistema sanitario alemán”.

“No es lógico, añaden desde el Sindicato de Enfermería, que el esfuerzo que se hace en formar enfermeras, con el gasto económico que eso conlleva, se destine a la sanidad alemana en vez de a la española. Por otro lado, nadie garantiza, continúa, que esos profesionales retornen alguna vez a nuestro sistema sanitario”.

Camas en los pasillos