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El sindicato ha enviado escritos a las Gerencias correspondientes para que se solucionen estos problemas

SATSE denuncia que los servicios sanitarios están empeorando porque cada vez se cuenta con menos enfermeras.

En el servicio de Despertar de Traumatología del Servet, se ha pasado, en el turno de tarde, de tres enfermeras a tan sólo una para prestar cuidados a hasta ocho pacientes. Se anuncia la supresión de enfermeras en el área de Ictus del Hospital de Calatayud, lo que supone privar a la población de referencia de este centro de una atención cualificada El CAR de Cinco Villas no va a cubrir una baja, que será prolongada, con lo que el servicio de Urgencias no cuenta con la plantilla suficiente para atender correctamente a los pacientes.

 SATSE ha remitido escritos a las Gerencias de las que dependen tres de los Hospitales afectados por estos recortes, el Miguel Servet, el Ernest Lluch y el CASAR de Cinco Villas en Ejea , para que solucionen la situación que se ha creado al prescindir continuamente de enfermeras. “Estos tres casos son sólo el inicio de lo que va a suceder si no se cuenta con la plantilla necesaria de profesionales de enfermería, además en muchos, o en casi todos, los servicios, se necesitan enfermeros cualificados, y ahora se está presidiendo de los que tienen años de experiencia en cuidados específicos”

 

Servicio de despertar de traumatología en el Servet.

Como ya denunció SATSE no se ha renovado el contrato a 33 enfermeras del bloque quirúrgico de este Hospital, y eso ha provocado, entre otras cosas, que la presencia de profesionales en el turno de tarde de la URPA, despertar de traumatología, se haya reducido de manera drástica. En esta unidad se atienden a los enfermos que acaban de ser intervenidos quirúrgicamente antes de pasar a su habitación en planta. “Hasta ahora en este servicio había tres enfermeras en el turno de tarde, y ahora sólo hay una que se tiene que encargar de todo el trabajo, asume los cuidados de los pacientes intervenidos por la mañana y no han sido trasladados a hospitalización, además, de atender también a los que han sido operados por la tarde”, explican desde SATSE, “En ocasiones ha tenido que hacerse cargo de 8 pacientes, enfermos que requieren unos cuidados y atenciones muy especiales”

Por esto SATSE solicita que se revise la situación de la URPA para que haya mayor presencia de enfermeras, “es la única forma de que estos pacientes reciban una atención de más calidad y adecuada a sus necesidades”.

 

 

Área ICTUS del Hospital de Calatayud

SATSE ha manifestado su rechazo a que se prescinda de las enfermeras del área de Ictus del hospital Ernest Lluch, son tres profesionales, dos en el turno de mañana y una en el de tarde.  “esta medida supondrá dejar sin atención de calidad a estos pacientes en toda la zona de Calatayud”.

Al disminuir el número de enfermeras en la planta donde está ubicada la Unidad  tendrá que ser la enfermera de esa planta la que atienda, además de los 28 pacientes ingresados por otros motivos, a los pacientes ingresados en la Unidad del ictus.

Desde el año 2009, en el que el Gobierno de Aragón elaboró el programa de atención a los pacientes con Ictus para mejorar sus condiciones de vida, el hospital Ernest Lluch era uno de los centros con equipo y área de Ictus.

Esta demostrado en distintos estudios científicos que la atención de pacientes con ésta patología en este tipo de unidades hace que se disminuya la estancia de los pacientes y aumenta su supervivencia. Uno de los requisitos fundamentales para que esta área de Ictus funcione es contar con profesionales de enfermería con formación específica dedicados en exclusiva a estos pacientes, una plantilla de la que ahora se prescinde.

Por todo esto, SATSE solicita que se mantengan estas enfermeras para que estos pacientes reciban la misma atención que el resto de los aragoneses.

Urgencias del CASAR

En este centro SATSE denuncia que no se cubra la baja de una enfermera que trabaja en el Servicio de urgencias a pesar de que se sabe que la ausencia será de muchos meses. “El problema es que en este servicio trabaja un única enfermera por turno, que sólo en determinados días, está apoyada por una auxiliar, el resto de las jornadas la enfermera debe asumir todo el trabajo, incluso funciones que no son su obligación. Esto ya es un problema, al que ahora se suma la baja que no se cubre .

El contar con una enfermera menos hace que el resto de la plantilla tenga que acumular el exceso horario que se genera, por lo que al final de año tendrá que realizarse una contratación para poder regularizar ese exceso.”Esa vacante se va a tener que cubrir tarde o temprano, por eso SATSE pide al Gerente que replantee su decisión y contrate una enfermera para cubrir esa baja”