Cemsatse pide a los próximos responsables del Servicio Aragonés de Salud que solucionen los problemas del SIRGHA

 Zaragoza, 13 de junio de 2011.-  El sistema integrado de recursos humanos, SIRGHA,  es un programa que se ha aplicado para la gestión de todos los recursos humanos dependientes del Gobierno de Aragón. Pero los responsables políticos no tuvieron en cuenta que el sector sanitario tiene unas características especiales ya que presta sus servicios las 24 horas del día y los 365 días del año y eso supone que se realizan noches, festivos y guardias. Los profesionales siempre perciben las cantidades correspondientes a estos conceptos a mes vencido y siempre se han imputado en los certificados que el propio Salud emitía a sus trabajadores como retribuciones correspondientes al año en que se perciben en la nómina y no al año en que se realizaron. Con el nuevo programa informático estas cantidades se perciben como atrasos por lo que obliga a realizar una declaración complementaria.

CEMSATSE ya solicitó que se buscara una solución a este problema pero ante la falta de capacidad de los  actuales responsables sanitarios para resolverlo, retomaremos esta problemática con los nuevos dirigentes.

 “ha quedado demostrado que es una chapuza más en la actual gestión del Salud, y no afecta sólo a los profesionales sanitarios, también se han visto perjudicados los de Hacienda, que tienen que intentar resolver las continúas dudas que se plantean a la hora de realizar esas complementarias”

Desde el sindicato se señala que los profesionales del Salud tendrían que contar con un método diferenciado “El SIRGHA no ofrece ninguna ventaja, al contrario, ha supuesto un perjuicio a los profesionales, los trabajadores de la sanidad pública tienen que tener un sistema que contemple todas las particularidades de ese ámbito que es muy complejo y con unas características muy especiales.”

Por ello Cemsatse pide que se adapte el programa a las características de la sanidad, y además, propone como solución que se estos conceptos se traten igual que la productividad variable, que aunque corresponde a ejercicios anteriores, no se imputa como atraso sino como rendimientos del año en que se perciben.